GOBIERNO De LUIS ECHEVERRIA ÁLVAREZ (1970-1976)
Luis Echeverría Álvarez gobernará un México muy lastimado después del 2 de octubre de 1968. Muchas personas lo señalaban como el autor de la matanza en Tlatelolco, pero ello no fue obstáculo para que Díaz Ordaz lo nombrara candidato del partido oficial; así, aquel recatado y silencioso Secretario de Gobernación pasó a ser la máxima autoridad del país
Desde su campaña presidencial dio claras de que su política era de carácter populista; procuró ganarse el afecto del pueblo y, sobre todo, de los estudiantes, aunque no logró convencerlos.
Para contrarrestar los efectos de la crisis del estado de bienestar, y debido a que el modelo de desarrollo estabilizador no daba más de sí, Echeverría pone en práctica el modelo de desarrollo compartido, con el cual el Estado tendrá una mayor intervención en los asuntos económicos del país. Esta política tiene dos finalidades; primero, procurar que la economía nacional no vaya a la quiebra y, segundo, que el presidente tenga un control absoluto ,sobre todas las cuestiones económicas: él dirá dónde se hace una presa, cuáles nuevos caminos y carreteras se harán y hacia donde conducirán. Con este modelo el Estado se asegura el control de todo, y le servirá para una impresión de estabilidad durante un largo periodo de la economía nacional.
En 1971 se decretó la Ley Federal de la Reforma Agraria, con la cual se le reconoció personalidad jurídica al ejido y se ampliaron las funciones que esos terreros podrían tener; por ejemplo, actividades turísticas, industriales o de pesca.
Por otra parte, nació en el país un movimiento guerrillero urbano, resultado del movimiento estudiantil de 1968, integrado por jóvenes estudiantes que realizaban actos vandálicos, como asaltos bancarios, secuestros de funcionarios y de empresarios, e incluso colocaban bombas para hacerse escuchar. Simultáneamente, la guerrilla en la sierra de Guerrero y Oaxaca seguía muy activa con Lucio Cabañas a la cabeza. Ambos grupos luchaban, en diferentes escenarios y con distintos métodos para llamar la atención del Estado, por acabar con la represión que el gobierno ejercía sobre los grupos marginados.
Entre los acontecimientos más sobresalientes del gobierno de Echeverría está el jueves de Corpus (10 de junio de 1971), en que un grupo de estudiantes universitarios en su mayoría politécnicos, marchaban del Casco de Santo Tomás hasta Reforma y avenida Juárez, pidiendo: a) libertad para los presos políticos; b) democratización de la enseñanza ; c) independencia sindical, y d) repudio del "charrismo". Cuando la manifestación llegó a la avenida de los Maestros y la calzada México-Tacuba, la estaban esperando miembros del grupo paramilitar "Halcones" , cuerpo represor del gobierno. Aquí se produjo otra matanza de estudiantes; hubo también heridos y aprehendidos. El gobierno del presidente del presidente Echeverría no aceptó su responsabilidad en lo acontecido, y para deshacerse de toda acusación pidió la renuncia del Regente de la Ciudad de México, antes llamado del departamento del Distrito Federal, Alfonso Martínez Domínguez. y el Director de Policía
y Tránsito del Distrito Federal, Rogelio Flores Curiel; asimismo, prometió una investigación exhaustiva para dar con los responsables de ese lamentable hecho, la que no ha dado resultados convincentes a la fecha.
Por órdenes del gobierno se constituyó el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los trabajadores (INFONAVIT), Para dotar de casa a los trabajadores, y el Fondo de Fomento y Garantía para para el consumo de los Trabajadores (Fonacot). que otorgaba créditos para la adquisición de muebles y aparatos electrodomésticos. todo ello con objeto de atraerse el favor de los trabajadores sindicalizados.
Respecto a la política exterior, el presidente Echeverría propuso en la ONU la carta de los Derechos y Deberes Económicos de los Estados que expone dos puntos básicos:
1,. Cada país puede disponer libremente de sus recursos naturales.
2.- Cada pueblo es libre de adoptar la estructura económica que le convenga.
Con estas declaraciones Echeverría pretendía que al finalizar su periodo presidencial se le nombrara Secretario General de la ONU, pero no fue así, porque su gobierno no fue bien visto debido a la gran crisis económica en que dejó al país en 1976.
Ante el golpe de estado en Chile en 1973, cuando el Presidente Salvador Allende (que era de izquierda que subió al poder por voto popular y legal) fue derrocado por Augusto Pinochet (militar apoyado por Estados Unidos, pues este país no podía permitir que un estado del Continente Americano fuera gobernado por un presidente de izquierda en un momento que la guerra fría estaba en su apogeo), la posición del presidente Luis Echeverría fue de apoyo total a Allende, por lo que le dio asilo político a sus familiares y a sus seguidores, lo que provocó que la relación de México con Estados Unidos fuera tensa, aunque sin llegar ala ruptura-
Al terminar su sexenio. la devaluación fue inevitable y el presidente quiso asumir toda responsabilidad y no dejarse a su sucesor (José López Portillo, su amigo de la infancia) el enorme problema que significaba empezar un nuevo periodo presidencial con una aguda crisis económica . En efecto, en 1976 la moneda se devaluó 100 % debido a la fuga de capitales, el recrudecimiento de la inflación y la disminución de los créditos externos. La deuda externa, que era de 5 mil millones de dólares, ascendió a cerca de 20 millones. Con esta devaluación, que cimbró la economía del país. Echeverría inició la mala costumbre de que al terminar un sexenio México había de someterse invariablemente a una devaluación y a una inflación que en diferentes grados perjudicaba la economía de los ciudadanos.
Las elecciones para el siguiente periodo presidencial fueron un hecho nunca antes visto en la historia del país, pues no hubo candidatos de ningún otro partido que disputara la presidencia. El candidato oficial único fue José López Portillo.
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